El momento que vivo me sirvió para encontrar la fuerza que siempre tuve pero que ni siquiera sabía que tenía. Perdí el miedo al miedo, porque cuando te encuentras con el mayor miedo que puedes experimentar en la vida y aún así luchas, descubres que el miedo solo existe en la cabeza, y que eres tú quien le alimenta y le da cuerpo y sentido.
Y te doy gracias; pues si, te doy gracias.
Pues, al menos en mi caso, también. Por todo lo increíble que nunca me hubiese sucedido sin tener mi enfermedad.
Por aprender a entender las almas más allá de las palabras y actos.
Por reconocer el miedo, enfrentarlo y vencerlo. El mío y el de los demás.
Por aprender a amar la propia existencia por encima de todas las cosas, a uno mismo por encima de todos los demás, y, sobretodo, a saber tomarle la medida a la vida, que es, exactamente, ninguna.
#gracias
#Mau
domingo, 31 de mayo de 2015
Un nuevo escrito a mi amada compañera, mi enfermedad:
miércoles, 20 de mayo de 2015
Así de rapido
Y de repente todo se viene abajo, de un momento a otro, sin que nadie estuviera preparado o que se me hubiera pasado antes por la cabeza, es increíble, crees que todo está bien y ¡pum! Todo se viene abajo, la ilusión, la esperanza, los sueños, los deseos, todo se va, y parece como si nada de esto se fuera a cumplir en el futuro, ese sentimiento de soledad vuelve, ese sentimiento de vacío, todas esas cosas que mas anhelas se alejan cada dia mas.
Podemos aprender grandes cosas de nuestras dificultades, cuando no estés ocupados en negarlos.
Hasta siempre querido amigo.
Mau
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